Conmemora PAN 121 aniversario del natalicio de Gómez Morín


Las presidentas del Comité Directivo Estatal y Municipal del PAN, Ana Lilia Gómez Licón y Paloma Aguirre Serna, encabezaron la conmemoraron del 121 aniversario del natalicio de Manuel Gómez Morín quien nació un 27 de febrero de 1897, en el municipio de Batopilas.

Las dirigentes del partido y sus militantes se reunieron en el monumento de Gómez Morín para conmemorar a quien fue el fundador del PAN con una ofrenda floral que fue colocada a los pies la estatua.

En el evento la dirigente municipal del PAN Chihuahua, Paloma Aguirre, reconoció las acciones que Gómez Morín emprendió para darle continuidad a la vida democrática y que esperanzaban al México de su époc , por lo que destacó que fue un revolucionario que estaba convencido que las fuerzas del estudio y del trabajo bien empelado haría mejores ciudadanos.

“No era hijo de panistas, era creador de panistas”, enfatizó al destacar que el anhelo que tuvo, fue que México puede y debe ser mejor a través de las instituciones, como hoy en día lo está presente con un gobierno humanista que defiende y cree en los 4 pilares de Acción Nacional.

A su vez la titular estatal del PAN, Ana Gómez, mencionó que año con año se reúnen para compartir las remembranzas de vida del fundador de Acción Nacional, así como su fructífera aportación al desarrollo social, económico y política del país.

Por otra parte expresó el reconocimiento que Gómez Morín tuvo por el paradigma de su época y su momento, que además de su amplio conocimiento y cultura también tuvo una gran  sensibilidad para identificar  los anhelos de una sociedad lastimada por su propia historia revolucionaria.

“Fue un constructor de instituciones y un forjador de conciencias y de ciudadanos libres, pensantes y comprometidos con la sociedad”, exclamó la dirigente estatal en discurso.

Por último el subcoordinador de diputados del PAN en el congreso local, Javier Malaxechevarría, recordó algunas de las memorias de Manuel Gómez Morín a través de un artículo que escribió el panista e ideólogo Carlos Castillo, en el año de 1997.

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