No importa que tan deteriorados puedan quedar algunos
egos en el camino, finalmente, es de seres humanitarios dar empleo a los pobres
psicólogos y psicoanalistas, no en balde pagaron tan cara su profesión o no en
balde la sociedad gasto tanto en formarlos.
Si alguien te la otorga, no era tan importante o relevante su punto de
vista, puesto que no hizo el intento por defenderlo. Si alguien objeta u opone
resistencia, escucha atentamente sus razones; si son pueriles, tendrás la
oportunidad de, además, menospreciarlo por ellas… Si alguien objeta tu razón y
descubres que sus argumentos son relevantes, probablemente ayuden a salvar una
vida o resuelvan un problema… respecto de quien expreso la razón, no te preocupes de darle las gracias;
finalmente, solo está cumpliendo con su deber (y, si lo hace fuera de contexto,
es irrelevante su acción).
Se tienen muchas
verdades pero no se hace nada para unificarlas y encaminarse a mejorar en los
diferentes aspectos de la vida; claro está que quienes encuentran su vocación
en decirles a las personas como deberían de ver la vida hacen un gran negocio
pues saben aprovechar las inseguridades de quienes compran todo lo que se les
dice o en el aspecto negativo realizan obras de corte amarillista y
sorprendentemente es lo que más vende ya que es más lucrativo la desgracia
ajena utilizando un lenguaje más vulgar pero sobre todo más comprensible para
el usuario que compra este tipo de trabajos, será acaso que la ignorancia en la
que está envuelta determinada sociedad hace más redituable este tipo de
negocios para las personas que los manejan y que desgraciadamente fomentan la
lectura rápida.
En el contexto de
lectura la sociedad mexicana está muy lejos de los países llamados del primer
mundo a pesar de que es muy rico en cultura y no se aprovechan todos los
espacios para fomentar el arte y la cultura, esta encasillado a estar viviendo
al día y no preocuparse por el futuro; en ciertos aspectos se podría decir que
se encuentran es paz ya que no piensan en otros aspectos que les depara el
mañana, muy a pesar de que existen muchas bibliotecas no se usan para
acrecentar el lenguaje o darle trabajo al cerebro para descartar lo que no se
necesita y objetar todo lo que se presenta con un buen uso de la razón; solo se
usan para cumplir con los trabajos de consulta de alguna institución educativa
y con ello obtener alguna calificación y no encontrar el gusto por las fuentes
de información que tiene a la mano.
Otra de las
razones de que la lectura sea nula es porque los buenos libros, si así se les
puede llamar, son de difícil acceso económico; aunque el argumento es relativo
pues pueden gastar mejor en otras cosas que en obtener una gratificación más
extensa pues hacen que su imaginación vuele. Para aquellos que quieren escribir
la primera premisa que deben conocer es que no se harán ricos escribiendo
libros, claro está que existirán los que si tienen buena fortuna o los medios
para distribuir su obra y recibir o recuperar su inversión en lo que están trabajando
y establecerse en la vocación que tanto están buscando, ya que de una forma u
otra se trabaja solo porque es lo que llego y no se da la oportunidad de hacer
lo que en realidad te gusta. Como dice el dicho: “hay que darle tiempo al
tiempo” y ya veremos que pasa.
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