El sentido común tiende hacia la idea de que el amor es
una emoción y que es irracional, las flechas de Cupido golpean sin razón. Pero las
emociones pueden ser racionales o irracionales; puede ser correcto o equivocado
sentir determinada emoción en una situación específica. ¿El amor es como la
ira? En el caso de la ira, el objeto de la emoción o es apropiado o no lo es,
se merece que alguien se enoje (con esa intensidad apropiada) o no lo merece.
Pero el amor
parece ser un caso diferente. No parece adecuado describir el objeto del amor
como (poco) meritorio o (in)apropiado. El amor no puede ser inapropiado solo porque
su objeto no es encantador (como cuando nos enojamos de manera injustificable).
Y no podemos amar “demasiado” (como cuando estamos muy enojados comparado con
las circunstancias).
Entonces qué es lo
que hace que las parejas se unan y duren como dice la frase: “felices para
siempre”, claro está que el estado de felicidad puede cambiar con el tiempo y
desgraciadamente las relaciones terminan porque se dejan vencer por la rutina y
ya no saben cómo encender la llama de la pasión y eso hace querer hacer cambios
tal vez nada agradables.
Ya en la actualidad son contadas las personas que pueden
celebrar cincuenta años de matrimonio o en su defecto aplican el hasta que la
muerte los separe, si se hace comparación la gente que proviene del campo son los
que tienden a durar más, como también puede haber casos extraordinarios donde las
parejas de las grandes ciudades pueden llegar a esos términos.
Cuál será la mejor
opción para estar en un estado de bienestar, ya que muchos solteros buscan
pareja porque ya se cansaron de estar solos, la ironía es que el soltero quiere
estar casado y el casado quisiera estar muerto, metafóricamente hablando no se
puede estar completamente equilibrado ya que la balanza siempre se moverá a
determinado lado para bien o para mal.
No se puede estar
completamente en estado de satisfacción ya que en muchas ocasiones nos dejamos
llevar por las emociones y son causantes de grandes conflictos, que en la mayoría
de los casos solo por soberbia o que siempre queremos ganar la partida o tener la razón y echamos culpas a los otros
pues no somos capaces de reconocer nuestros errores.
Es como el caso
donde se nos proporciono dos oídos para escuchar mas y una sola boca para
hablar menos, pero es caso contrario ya que hablamos de mas y no escuchamos; no
aprendemos a controlar lo que sentimos y tal parece que la lengua que tenemos
es la mejor arma que nos acompaña y siempre somos los mejores atacantes y no
estamos en la posición de defensores. Estamos conscientes que utilizamos el
amor como moneda de cambio y no por lo
que vale. Así que tal vez el amor no sera para nada una emoción.
Comentarios
Publicar un comentario