Los utilitaristas del acto sostienen que debemos juzgar cada acción individual según las consecuencias que resultan de ella. Esto nos permite tomar en cuenta las circunstancias únicas de cada acto. Sin embargo, también requiere mucho tiempo y esfuerzo. Esta es la razón por la que algunos utilitaristas, llamados utilitaristas de las normas, sostienen que deberíamos actuar siguiendo reglas o principios que, en general, conlleven las mejores consecuencias. Esto todavía requiere algún esfuerzo, pero no tanto como el utilitarismo del acto. También sostiene que nunca esta bien tratar a una persona solo como medio para lograr un fin.
En muchos sentidos no se puede estar completamente bien de una u otra forma ya que no se puede, o no queremos, apegarnos a lo que se estableció como costumbre ya que estamos tan acostumbrados a lo que se nos hace mas fácil, sin siquiera razonar de que otra forma podríamos lograr resultados diferentes desde una óptica apegada a la realidad, pero no nos dejamos influenciar por la novedad y no analizamos si quiera si es necesario para la actividad diaria en todo caso para un uso continuo.
Si acaso nos apegamos a la idea, que muchos no están acostumbrados a decir por ejemplo, la verdad, solo buscan salidas para un problema que se vuelva cada vez mas grande, o si acaso nos apegamos tanto a lo que decimos que nos llegamos a creer todo lo que decimos como si fuera una vedad única y cada vez que nos cuestionan o escuchamos ciertos puntos de vista no dejamos que las nuevas ideas fluyan, para mejorar lo que se dice pero se apegan tanto a la idea que prácticamente mueren con ella.
El realizar acciones que pueden acarrear consecuencias y no dejar que estas influyan en nuestra forma de pensar, pues no nos agrada el fracaso y solo nos gusta lo que esta bien, solo por la comodidad que esta representa, pero si actuamos de forma que tanto una como la otra, se compensen de alguna forma, la visión tal vez nos ayuda a que todas las acciones realizadas sigan de una forma acrecentado la forma de ver las cosas y no porque las figuras de poder tengan conveniencia a lo que se les presente o que sea equitativo y para beneficio de ambos pero nos dejamos influenciar por nuestras propias limitaciones.
Cualquier forma para la toma de decisiones se pude transformar en cierta molestia para los otros pero si estamos conscientes de que tratamos de mejorar en lo que realizamos, no esperemos que para todos sea agradable lo que se trata de transmitir o si acaso no es bien recibido, no lamentarnos porque la idea no prospero ya que se deben tocar puestas y si se cierran todas buscar una ventana para que lo que transmitimos no sea solo mera casualidad y dejar huella para futuros proyectos.
En muchos sentidos no se puede estar completamente bien de una u otra forma ya que no se puede, o no queremos, apegarnos a lo que se estableció como costumbre ya que estamos tan acostumbrados a lo que se nos hace mas fácil, sin siquiera razonar de que otra forma podríamos lograr resultados diferentes desde una óptica apegada a la realidad, pero no nos dejamos influenciar por la novedad y no analizamos si quiera si es necesario para la actividad diaria en todo caso para un uso continuo.
Si acaso nos apegamos a la idea, que muchos no están acostumbrados a decir por ejemplo, la verdad, solo buscan salidas para un problema que se vuelva cada vez mas grande, o si acaso nos apegamos tanto a lo que decimos que nos llegamos a creer todo lo que decimos como si fuera una vedad única y cada vez que nos cuestionan o escuchamos ciertos puntos de vista no dejamos que las nuevas ideas fluyan, para mejorar lo que se dice pero se apegan tanto a la idea que prácticamente mueren con ella.
El realizar acciones que pueden acarrear consecuencias y no dejar que estas influyan en nuestra forma de pensar, pues no nos agrada el fracaso y solo nos gusta lo que esta bien, solo por la comodidad que esta representa, pero si actuamos de forma que tanto una como la otra, se compensen de alguna forma, la visión tal vez nos ayuda a que todas las acciones realizadas sigan de una forma acrecentado la forma de ver las cosas y no porque las figuras de poder tengan conveniencia a lo que se les presente o que sea equitativo y para beneficio de ambos pero nos dejamos influenciar por nuestras propias limitaciones.
Cualquier forma para la toma de decisiones se pude transformar en cierta molestia para los otros pero si estamos conscientes de que tratamos de mejorar en lo que realizamos, no esperemos que para todos sea agradable lo que se trata de transmitir o si acaso no es bien recibido, no lamentarnos porque la idea no prospero ya que se deben tocar puestas y si se cierran todas buscar una ventana para que lo que transmitimos no sea solo mera casualidad y dejar huella para futuros proyectos.
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