·
Una
pastilla diaria antes y durante el primer trimestre del embarazo permite que la
mamá y su hijo estén en condiciones óptimas en la gestación.
El Instituto cuenta con abasto suficiente de esta vitamina en sus
unidades médicas y durante las Semanas Nacionales de Salud.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) promueve la toma de ácido
fólico en las mujeres que desean ser mamás, entre tres y seis meses antes del
embarazo y en el primer trimestre de la gestación, pudiendo prolongarse hasta
su término, ya que previene diversos defectos neurológicos que pueden surgir en
el cerebro del bebé y en el sistema nervioso, que dañan la columna vertebral,
al tiempo disminuir el riesgo de bebés con bajo peso al nacer.
El doctor David Salvador Medina Camarena, Coordinador de Programas
Médicos en la División de Atención Prenatal y Planificación Familiar del IMSS,
señaló que la toma de una pastilla diaria de esta vitamina permite obtener
diversos beneficios al estimular que las células que forman al bebé se
produzcan de manera normal y armónica, así como el desarrollo correcto de los
rasgos genéticos y hereditarios.
Afirmó que el Seguro Social cuenta con abasto suficiente de frascos de
ácido fólico en sus unidades médicas para proporcionarlo a las mujeres durante
la atención con el Médico Familiar, en el caso previo del embarazo, o en la
consulta prenatal, cuando la mujer está en las primeras semanas de la
gestación.
De la misma manera, dijo, hay abasto garantizado durante las Semanas
Nacionales de Salud, con el objetivo de que todas las mujeres derechohabientes
en edad reproductiva, idealmente entre los 20 a 35 años de edad, obtengan sus
múltiples beneficios.
Enfatizó que el ácido fólico también tiene efectos benéficos en la
mujer, ya que previene o cura la anemia; si no fue posible la ingesta previo al
embarazo, es de gran importancia que lo tome durante los primeros tres meses de
la gestación y continuar tomándolo si el médico lo recomienda.
El especialista del IMSS también recomendó que la mujer y sus familiares
conozcan los síntomas que provoca la deficiencia de ácido fólico, como son
cansancio, dolor de cabeza, palidez, úlceras en boca o lengua, trastornos del
sueño y falta de memoria, para que la paciente acuda de manera oportuna con su
médico.
Esta vitamina, también conocido como folatos, tiene su origen en las
hojas verdes, por lo que el doctor Medina Camarena recomendó que antes y
durante todo el embarazo, la mujer también incluya en su dieta diaria el
consumo de alimentos tales como espinacas, berros, brócoli, lechuga, aguacate,
habas, chícharos, soya, frijoles, almendras y avellanas; también de origen
animal como hígado y vísceras; frutas como toronja, naranja y plátano, y
cereales adicionados con vitamina B9.
Agregó que para aprovechar el contenido de folatos en estos alimentos,
se evite exponerlos a altas temperaturas, ya que son sensibles al calor y se
disuelven en agua, por lo que aconsejó consumir los vegetales crudos y los
productos de origen animal, asados a la plancha.
Comentarios
Publicar un comentario