"La Comisión Estatal de Derechos Humanos fue convertida en un costoso elefante blanco, una lavandería de culpas del ejecutivo estatal, supeditada a los designios de su titular y desacreditada ante la ciudadanía por su incapacidad para ponerse del lado de los ciudadanos en la defensa de los derechos humanos ", dijo Mario Vázquez Robles después de revisar el informe del presidente de la institución, José Luis Armendáriz.
El dirigente estatal panista señaló que dicho informe refleja lo que los ciudadanos desde tiempo atrás ya han denunciado públicamente; la sumisión de su titular a los intereses del ejecutivo estatal y la desconfianza de los ciudadanos hacia una institución que en lugar de defender a los ciudadanos, se interesan más en lavar y desmanchar los abusos del poder cometidos desde el gobierno estatal.
"No hay resultados que nos alienten y hagan pensar que los derechos humanos son garantizados en nuestra entidad; el único avance notable es el engordamiento de la institución, un aparato enorme que no justifica su costo, pues está totalmente supeditado al gobierno y no tiene libertad de actuación.
Es incomprensible como José Luis Armendáriz celebra al gobierno estatal su manejo del sistema penitenciario en Chihuahua mientras que al interior de los reclusorios la vida de los internos está en grave riesgo día a día y en esos lugares se asesina sin que la autoridad carcelaria sea capaz de prevenirlo y evitarlo, como sucedió con José Enrique Jiménez Zavala, conocido como el Wicked y que recientemente fue privado de la vida en una celda del reclusorio de Chihuahua.
Lo más lamentables es que los ciudadanos han dejado de recurrir a la CEDH para buscar apoyo frente a los abusos de la autoridad, pues tienen claro que la institución se inclina a defender al Estado en lugar de ponerse de su lado, lo que lleva al registro de cada vez menor número de quejas "y no precisamente porque los abusos hayan disminuido, sino porque de nada sirve denunciarlos ante la CEDH", precisó.
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